viernes, 22 de julio de 2011

Miedo

    Hoy me levanté un poco tarde, gracias a las dos semanas de vacaciones escolares de mi niña puedo dormir más, cosa que ha sido muy conveniente pues me encuentro enferma desde hace unos días y aproveché para descansar, fiel a mi costumbre enciendí el televisor con las noticias, me gusta estar informada, aunque lamentablemente no tengo canales de noticias internacionales; me quedé inmóvil al leer sobre la explosión en Oslo, de inmediato pensé en Peter; había regresado de Dublin y quizás se encontrara trabajando, con miedo le escribí, mi peor temor ha sido siempre que algo pueda pasarle y que yo no me entere nunca, no soporto la incertidumbre, y en mi situación no hay nada de lo que pueda estar segura, no se si alguien de su entorno sabe sobre mí, su familia, sus amigos, yo lo dudo, aunque él diga lo contrario, que les ha contado. En fin, gracias a Dios, él está bien, pero no pude sacarme la angustia, y me dediqué a ver varios noticieros buscando más información, es tan raro, antes lo que pasara en su país no tenía gran relevancia para mí, ahora cualquier pequeña noticia es de suma importancia, buscando información sobre su cultura es como llegué al mundo de los blogs; es una búsqueda, una forma de intentar comprender lo que no entiendo, me encuentro en inferioridad de condiciones, yo le revelé mi alma, estoy desnuda frente a un extraño al que sin embargo amo, no hay en mí gran misterio, soy tan común, lo único que quería en esta vida era tener una familia, él por el contrario es tan difícil de entender, yo sabía de su problemas previos, pero creí que eran cosa de la edad, que ahora era maduro y que estaba seguro de sus sentimientos...
    Analizo nuestros vidas, el porqué los dos estamos sólos, en mi caso, nunca tuve problema para relacionarme con un hombre, pero si bien por un lado no he tenido suerte y siempre he sido imán para los mal intencionados, por otro lado, mis malas elecciones han dado como resultado aislarme de mis amistades, yo misma me cerré las posibilidades, no era importante antes, estaba encandilada por las luces de neón y el humo de las discos... pero él, no lo entiendo, es tan rara la mente humana, no dudo de sus  problemas emocionales, el  miedo al compromiso, lo que no puedo comprender son los motivos; a veces sé que realmente me extraña, lo siento, pero otras veces noto que realmente disfruta de su soltería, mientras tanto sigo en el medio, sintiéndome su cura y su enfermedad.

martes, 12 de julio de 2011

el invierno y la distancia

        No entiendo nada, me confundo tanto cuando estas cosas ocurren, es mi culpa lo sé, no se porqué me empeño en escribirle, en responderle, debería haber terminado todo ese mismo día en el aeropuerto de Río, pero quiero verlo una vez más, la última, siento que no alcanzaría la paz si no lo veo otra vez, no quiero guardar ninguna esperanza, ya me ha roto el corazón dos veces, la primera puede haber sido mi culpa, la segunda jamás debería haber aceptado, !pero lo quería tanto! lo amo, lo amé, no lo sé bien, hoy siento enojo, a través de tus mensajes armo pequeños retazos de tu vida, de esa vida que te negaste a compartir conmigo, de esa vida que es tan lejana para mi, no se qué es real, qué es mentira, no sé si les contaste alguna vez a tu familia sobre mí, te entregué el ramito de flores que llevaría en la boda para que se lo dieras a tu madre, dudo que ella lo haya recibido...
      Siempre es una excusa, ahora es el invierno, el frío invierno nórdico, al que supuestamente  no me acostumbraré, pero al menos esta vez le dije que no, no quiero ser su aventura latinoamericana, quiero un esposo, una familia, pero él no quiere incluirme en su vida, ¿qué estabas pensando al proponerme mantener una relación de este estilo?¿¡ once meses es tu país, soltero, un mes en el mío con derecho de meterte a mi cama?!!! y como consuelo me dice que en 15 años podrá jubilarse, no me quiere en su vida, ¿entonces para qué me escribe, para qué quiere venir a visitarme?
     Soy una tonta, no puedo ser mala, sufro en silencio, no hay nadie con quien hablar, nadie lo nombra, nadie me pregunta por él, mi familia y mis amigos no quieren mortificarme, pero  yo necesito hablar sobre él, porque no se ha ido todavía de mi corazón...

lunes, 13 de junio de 2011

Crecer

     Estos días no he estado escribiendo, la semana pasada como resumen. puede considerarse buena, aprobé dos parciales, tuve una buena sesión con la psicóloga de mi niña, eso me ayudó a relajarme un poco, suena  extraño, pero estoy comenzando a conocer a mi niña, aunque con ayuda, ambas tenemos que encontrar el lugar que nos toca en esta nueva etapa, perder el miedo a crecer, es difícil ya que en mi mente la sigo viendo como mi bebé chiquitita, y me sigo viendo como la adolescente ingenua y soñadora que fui.
    ¿Podrá la lluvia con su manto de piedad detener el tiempo para nosotras dos? Me gusta la lluvia, pero  no cuando hace frío ya que pienso en las personas sin techo, me gusta la lluvia de verano, me recuerda  a la infancia, a mis abuelitos, a los barquitos de papel, a mi busito color celeste, me gusta la lluvia porque detiene el tiempo,  limpia mis penas, se confunde con mis lágrimas...

miércoles, 1 de junio de 2011

Frustración

       Hoy mientras esperaba al frente del colegio de mi niña que el micro escolar llegase luego del torneo de handball, pensaba en que tenía ganas de escribir, del pasado, de un amor que tuve, de como me fui complicando la vida, eligiendo malas opciones, de como me gusta el otoño en Buenos Aires, pensaba en él también, en su país lejano y nublado, (al menos, así lo imagino), del hogar que no pude tener y de la niña que nunca concebiré. Todo eso estaba en mi mente, hasta que llegó mi niña y volvimos caminando a casa.
     Muchas veces me gustaría estar sola, marcharme a la montaña, al sur de mi país, poder curar mi tristeza, poder controlar este torbellino de emociones que llevo dentro y que hace explosión siempre con quien no debe, con quien no lo merece. No he aprendido a ser madre, hija, ¿por qué no puede haber un punto intermedio?¿por qué no soy capaz de encontrarlo, de aceptarlo? Desde la niñez he sido así, obsesiva de la atención de la persona amada, con ella, con mi abuela, tuve un buen vínculo, era amor, así lo sentía yo, así me sentía yo, amada y completamente dichosa de ese amor, pero yo no soy mi abuela y ahora que ese ser reclama de mi lo mismo que yo a su edad, no puedo aceptar ver mi reflejo en ella, no, así no, la quiero distinta a mi, la quiero feliz, la quiero perseverante, capaz de forjar sola su camino, una mujer fuerte, decidida, no un ser inseguro, inconstante y emocionalmente inestable como yo. Quiero hacer lo mejor para ella, me esfuerzo por darle las herramientas que la lleven a ser mejor que yo...¿ será por eso que mi frustración estalla ante sus pequeñas faltas infantiles? ¿me resulta demasiada pesada esta carga, esta responsabilidad que recae en su totalidad sobre mis hombros? ¿ o solo es la bronca que brota de mis entrañas, de la parte más oscura de persona? ¿acaso no lo había perdonado ya? eso fue lo que le dije, pero no se si es cierto, ante cada pequeño tropiezo, mi rencor hacia él surge multiplicado, reclamando el hogar que no le brindó, la seguridad y los cuidados que solo quedaron en sus mails, la nueva Patria nunca vista, el vestido blanco que quedó sin ser usado.
      Es tan triste un vestido de novia sin usar, en cada uno de sus pliegues, una ilusión, un sueño, una esperanza se va llenando de polvo, nunca me lo probé, me hubiese visto bien en el, pero mi príncipe sapo no me dio ninguna chance.

martes, 31 de mayo de 2011

La madre que pude ser

     Mi hija tiene casi 11 años, yo era joven cuando ella nació, realmente no "elegí" el mejor momento para traer otra vida al mundo, pero lo hice, ¿me equivoqué? ¿quién lo juzgará? yo creí que ese ser merecía vivir, crecer, nutrirse, ser feliz, un hijo de Dios en el valle de mis lágrimas. ¿La desee? ¿Fue una inconsciencia? trato de analizarme, pero me miento a mi misma, no quiero la verdad, lo que veo tan fácilmente en otras, lo niego en mi, ¿desee ese hijo? muchas chicas tienen bebés porque no han logrado proyectar un futuro, no se sienten amadas y buscan en el hijo conseguir ese amor perfecto, incondicional, el amor de Dios hecho carne en ese bebé, mío, mío, y yo que nada tenía, de pronto esa vida entre mis manos, ¿cómo cuidarla? era tan inocente entonces, y la realidad tan dura, con todas esas personas que me miraban con pena o con desprecio, por haber decido "arruinarme la vida", nadie era feliz, nadie celebraba la vida de mi niña en mi vientre, alzando sus piedras para castigarme... le he dado mi vida, si, mi juventud, pero ella es lo único real, lo único por lo que tiene sentido morir y vivir.

Había una vez...

      Me llamo Sara, es increíble, pero debo admitirlo, acabo de cumplir 30 años, estoy un poco horrorizada aún, no era así como había imaginado mi vida a los treinta, si es que alguna vez me detuve a pensar en ello, creo que no, no al menos  hasta hace dos o tres años atrás. Mi vida había transcurrido entre humo, música y risas falsas, no, en ese tiempo yo no pensaba que también los seres pocos dotados como yo merecían una familia, un amor, me conformaba con romances de mentira, prestados, sacados de un libreto. Había días en los que la soledad me golpeaba, domingos en la plaza, en el zoológico, cuando con mi niña mirábamos a las familias compartir su alegría, quizás ella no lo notaba, ella es feliz conmigo, esa angustia era mía, pero lo compensaba pensando que era bonita, joven y de buen cuerpo, que yo elegía estar soltera, que era deseada por muchos varones, eso era cierto, pero ninguno de ellos traía buenas intenciones.
    Siempre tuve baja auto-estima, mi humor dependía de mi peso, y como soy de buen comer y contextura importante, mi lucha contra la gordura era implacable, dietas, gimnasio todos los días, cremas, esas cosas que las niñas de poco juicio hacen para verse bellas para los otros, buscando la admiración de los hombres, y la envidia de las mujeres; de todas maneras, la "solterona" era yo y lo sigo siendo, no porque realmente lo crea así, sino porque la sociedad en la que me he criado me ha enseñado desde pequeña que la felicidad se alcanza estando casada, teniendo un marido, se que esto no es cierto, por lo que dicen, la vida en pareja es muy difícil, hay que ceder muchas veces, que hay muchos conflictos para afrontar juntos y no todos logran mantenerse unidos, y sin embargo siento la angustia, la tristeza y la nostalgia de algo que es inalcanzable para mi.

Mi primer post

      Hace tiempo que sigo varios blogs, encontré este espacio por casualidad, buscando información sobre latinas que se hayan casado con noruegos, tenía curiosidad, necesidad de ver como percibían ellas la vida en un país diferente, tan lejano, alejadas de su familia, pensaba en ese entonces, que algo de eso me tocaría a mi también y quería estar preparada para que no me resultase tan desalentador; así es como llegué al blog de una chica peruana, "Anti ama de casa desesperada", comencé a leer sus publicaciones, luego ella ya no posteó más,   me di cuenta que podía seguir otros blogs, leer y comentar, y eso he estado haciendo en los últimos meses; algunos son muy adictivos, los sigo siempre, en realidad no se el porqué, curiosidad, admiración, nostalgia de lo que pudo ser mi vida... Me toca de cerca, me siento identificada y he compartido mucho de los sentimientos de las mujeres que tienen un amor a distancia, quizás esa sea una de la razones por las que me "enganché" con varias de las historias que sigo, buscaba a alguien que comprendiese que era posible, salvar las distancias, los miles kilómetros que me separan del hombre que amo.